Canales radiculares
Si te preocupa realizarte un canal radicular, no te preocupes. Es un procedimiento dental común que se realiza más de 15 millones de veces al año, según la Asociación Americana de Endodoncia.
¿Cuándo necesitaré un canal radicular?
Tu diente tiene dos partes: la corona, que está por encima de la línea de las encías, y la raíz, que está por debajo. En el centro de tu diente, la pulpa es una colección de vasos sanguíneos, nervios y tejido que sostiene la dentina circundante, el tejido debajo del esmalte del diente. La pulpa puede infectarse debido a trauma, caries, grietas o astillas, o procedimientos dentales repetidos. Los síntomas incluyen:
Daño visible en el diente
Dolor en el diente y encías
Dolor al morder
Una lesión en el tejido de la encía conocida como fístula y comúnmente llamada ampolla gingival
Inflamación
Sensibilidad a alimentos y bebidas calientes y frías
Pus alrededor de un diente
Un diente flojo
Un canal radicular puede salvar tu diente y prevenir la necesidad de un implante dental o puente. Después de que se elimina la infección, tu diente puede sobrevivir sin la pulpa. Un canal radicular puede aliviar tu dolor y hacer que tu diente vuelva a estar sano.
¿Qué ocurre durante un canal radicular?
En un procedimiento no quirúrgico, el área se adormece con un anestésico local. Tu dentista elimina la pulpa lesionada, luego limpia y sella el sistema de conductos radiculares. El procedimiento se completa en una o dos visitas. Los canales radiculares tienen un 90% de éxito y cuestan mucho menos que reemplazar tu diente dañado con un diente artificial.
Después del procedimiento
Puedes conducir a casa después de realizarte un canal radicular y regresar a tus actividades regulares. Tu diente estará adolorido, así que necesitarás masticar del otro lado de tu boca hasta que sanes. Puedes usar medicamentos de venta libre para tratar el dolor.
Se necesita un empaste o una corona después de completar un canal radicular para proteger el diente. Una vez terminado, tu diente se verá y sentirá normal. Incluso puede verse mejor que antes del canal radicular. Sin embargo, aún podrías sentir dolor durante varias semanas o meses después de un canal radicular.
Un canal radicular no solo puede evitar que experimentes mucho más dolor en tu boca y bolsillo en el futuro, sino que también mejorará tu salud dental.